• Pinturas de gran formato en óleo y acrílico sobre tela o madera en su mayoría, distribuidas en un políptico y un montaje emplazado conforman la muestra colectiva “Carne y cosa, naturaleza figurada” que inaugura la Factoría de Arte Santa Rosa.

• María Elena Cárdenas, Javier Lewin, Paz Castañeda, Gabriela Carmona, Francisco Cintolesi, José Manuel Dumay y Teresa Larraguibel son los artistas que dan vida a esta exhibición curada por Víctor Hugo Bravo, cuyo hilo conductor es la representación de la mancha pictórica extendida al cuerpo y a las cosas como ejercicio íntimo que al final configura la percepción del mundo.

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Inspirado en el hecho de que la significación del arte siempre está sujeta a las capacidades de percepción del artista y su capacidad para representar el mundo, el curador Víctor Hugo Bravo reúne en esta muestra a un grupo de artistas de gran trayectoria  y oficio que dominan a cabalidad el lenguaje pictórico.
 

Es así como esta muestra articula varias visiones disimiles de esa captura mediatizada, en este caso atravesada por una manufactura asentada en diferentes gestos subjetivos. “Una representación del entorno adquiere y suma sentido en la medida que ésta sobre-recoge la mano para organizar un espacio virtual donde el referente y la mirada son los cazadores específicos de un código, comprendiendo este alfabeto como la persecución personal de algo que está afuera, que nos interesa estatizar y detener”, señala el artista y curador Víctor Hugo Bravo.

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“De este proceso surgen, bajo una forma pictórica que podría ser estándar en cuanto materia, color y mancha como herramientas de traducción, variantes visuales que están acotadas a la imagen, a la pluralidad del universo iconográfico contemporáneo. Lo que vemos es una manera más de presentar el material pictórico en función de una nueva imagen que se instala en la fuga, escape del tecnohumano, por eso la retroacción y la cacería que hacen cercanía a un gesto, hoy ya atávico, con el cual se puede retener un fragmento de realidad en una sola y ultima mediación, la mano que ejerce y desplaza un estado singular, ese que marca la diferencia, ese que determina la distancia a la reproducción mecánica a la mimesis, a la copia”, reflexiona Bravo.